¿Alguna vez ha sentido que no merece el éxito o los logros que tiene? ¿Alguna vez ha sentido que no es tan inteligente como la gente cree que es? Si respondió “sí”, es posible que haya experimentado una forma de síndrome del impostor. Este fenómeno fue descrito por primera vez por psicólogos en 1978 y según estudios puede afectar a cualquier persona, independientemente del puesto de trabajo y condición social. Esta experiencia suena especialmente cierto con individuos de alto rendimiento, particularmente las mujeres.
Que es síndrome del impostor? Según la Biblioteca Nacional de Medicina y los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU., El síndrome del impostor (también conocido como fenómeno del impostor, síndrome de fraude, fraudulencia percibida o experiencia del impostor) describe a personas de alto rendimiento que, a pesar de sus éxitos objetivos, no logran internalizar sus logros y tienen dudas persistentes sobre sí mismos y temen ser expuestos como fraudulentos o impostores.
Es importante aprender cómo el síndrome del impostor puede frenarlo porque puede afectar muchas áreas de su vida personal y profesional. Estudios revelan que el 70 por ciento de los millennials tienen síndrome del impostor. Es algo muy real y no está solo.
¿Cómo detiene a las personas el síndrome del impostor? Al síndrome del impostor le gusta alimentarse de los miedos que ya tiene, por lo que puede aparecer en su vida de las siguientes formas:
- Teme hacer las cosas mal todo el tiempo, lo que afectará su desempeño laboral en general.
- Evita asumir responsabilidades y limita sus tareas fuera de su zona de confort.
- Crea más dudas acerca de sus logros y falla en reconocer sus victorias.
- Atribuye su éxito a factores externos como la suerte y niega sus propias contribuciones.
- Experimenta insatisfacción laboral y agotamiento debido a que se siente inadecuado para el trabajo.
- Deja de buscar oportunidades porque no cree que se las merece.
- Usted se fija metas difíciles y se castiga cuando no puede lograrlas.
Aquí hay cinco estrategias saludables para ayudarlo a superar el síndrome del impostor y encontrar formas de prosperar como individuo de alto rendimiento:
- Empiece por preguntarse, ¿cómo se siente cuando logra algo?
- Luego, acepte que siente lo que siente en lugar de castigarse por ello.
- Trate de revisar regularmente sus logros y encuentre formas de darse una palmadita en la espalda.
- Desarrolle un guión de mantra para ayudarlo a fortalecer la idea de que se lo merece y aumentar su confianza.
- Solicite comentarios de compañeros, mentores y colegas para que le ayuden a ver su propio trabajo a través de sus ojos.
La buena noticia es que muchas personas experimentan los síntomas del síndrome del impostor en algún momento de su vida o carrera. Puede sentirse como un estrés debilitante e inductor de ansiedad; pero debe recordar que las percepciones no siempre reflejan la realidad. Consulte con usted mismo y practique el reconocimiento de sí mismo. Lo más importante es que recuerde que es digno de tener éxito y que es mejor y más inteligente de lo que se permite pensar. Una de mis citas favoritas de Mark Twain dice: “Un hombre no puede estar cómodo sin su propia aprobación”.
EDGAR RAFAEL OLIVO es un educador empresarial bilingüe, asesor económico y colaborador de varios medios de comunicación. Es apasionado por la educación y comunidad. Está certificado en finanzas y análisis de datos y posee un título en negocios de la Universidad Estatal de Arizona.
To see this article in English, click here.
Speak Your Mind
You must be logged in to post a comment.